Asesinar bebés no es delito en el patriarcado
Anoche hablaba de las becerradas con una amiga. Porque ponerse delante de un toro de 500 kilos es una cosa, por mucho que les hagan de todo para que siempre pierda. Pero son 500 kilos y unos cuernos que pueden costarte un disgusto. Al menos impone. En el caso de los becerros se trata de un acto de cobardía extremo que es comparable a los viajes que hacen siempre hombres a lugares remotos para violar niñas y niños. La superioridad en número, física, de fortaleza es tal, que sólo de verlo me hace sentir mal. Sé lo que es sentirse intimidada, violentada. Sé lo que es el patriarcado.Tanto feminismo como veganismo defienden que mujeres y resto de seres sintientes no pueden ser tratados como objetos sino como sujetos con derechos iguales, inalienables e intransferibles. Por lo tanto, sexismo y especismo son prejuicios que van de la mano, con la misma estructura ideológica. Sexo y especie. El sexismo, gracias a la lucha incansable de las feministas, está rechazado en los niveles más conscientes de la sociedad. El especismo es una forma de discriminación asumida y apoyada por la práctica totalidad de la humanidad. Incluidas las mujeres. Incluidas la práctica totalidad de las feministas.
Mediante el activismo podemos visibilizar la opresión que ejercemos hacia el resto de seres sintientes, de la misma manera que las feministas tomaron las calles para sacar a la luz la opresión que la mitad de la población humana mundial ejerce hacia la otra mitad. Por el mero hecho de haber nacido en un cuerpo leído mujer. Por el mero hecho de haber nacido en un cuerpo leído animal…